Democracia en 2013:
el maltratador (el Estado además de los mercados y los
bancos) tiene impunidad.
Puede prevaricar, enchufar a toda su familia y amigos,
enriquecerse con el dinero de los contribuyentes, ignorar al pueblo y reírse de
él porque ni siquiera se les puede echar (en qué otros cargos laborales ocurre
eso? Y sólo ellos, pueden admitir a trámite y votar las leyes que les blinda,
les da impunidad y les enriquece aún más. Por la misma regla de tres, que los
ladrones voten las leyes que deberían regular su actuación, ¿no?
La víctima, el maltratado, desahuciado, engañado y robado
(pagamos impuestos para que los maltratadores anteriormente nombrados puedan
seguir en el poder, con total impunidad) no puede defenderse porque toda la
sociedad, los medios, los tertulianos estarán esperando como hienas para
acusarles de violentos, filoetarras, radicales, etc
Y cuando haya debates televisados, al que defienda a los
colectivos que luchan por ser un altavoz y por dar solución al drama de gente
sin casa, sin comida, sin trabajo, al drama de la desesperación de que te
persiga Hacienda y que te desahucien por dejar de pagar una mensualidad (por no
poder, por tener que elegir entre comer o dar de comer a sus hijos y pagar el
alquiler); a ese portavoz, se le acusará de demagogia y populismo barato, se le
tergiversará, insultará, se le intentará sacar de sus casillas hablando de
ideologías con la única finalidad de desviar el tema del debate…
La víctima de este crimen no puede manifestarse, ni alzar la
voz, ni insultar, ni pegar pegatinas, ni ocupar viviendas vacías desde hace
años, ni ir a casa de algún político a decirle cuál es su situación, ni
acercarse al Congreso a decirles que paren ya de ahogarnos mientras viven a cuerpo
de rey gracias a nuestros impuestos, ni llevarse un carrito de comida para
darla a algún comedor social para que los medios se interesen mínimamente por
la situación de ciertas personas en ciertos pueblos de España. Es decir, la
víctima no puede defenderse por más que le ataquen. Sea lo que sea que intente hacer será ilegal,
ilegítimo o antidemocrático.
Eso sí, la víctima puede votar.
¿Qué democracia es esta? ¿La de la Rebelión de la granja de
Orwell? O las leyes y los castigos, los derechos y obligaciones, los sueldos
(con rangos no abusivos) y otros beneficios laborales, además de las
obligaciones fiscales (sin ingenierías fiscales sólo para algunos) se aplican
por igual a todos,
o esto NO ES UNA
DEMOCRACIA.
Es caciquismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario